El método epigráfico como aproximación a la construcción de la identidad en la antigüedad romana

La epigrafía (del griego «επιγραφή») es una disciplina a la que recurren diversos campos del saber humanístico cuyo objeto de estudio son las inscripciones sobre materiales altamente duraderos desde múltiples perspectivas. Así, el análisis de dichos testimonios no sólo atañe al mero desciframiento de su contenido lingüístico sino también a otras cuestiones íntimamente relacionadas con su soporte, funciones o materiales de producción; pues la suma de este conjunto de características aporta datos en torno a diversas cuestiones históricas, jurídicas o geográficas que evocan un contexto social concreto de ese pasado remoto.

Gracias a este método es posible conservar una fotografía certera de una esfera social de la antigüedad que sirve a la compleción de las investigaciones en torno a la vida y costumbres de una cultura. Independientemente de su tipología (funeraria, honoraria, votiva o monumental, entre otras), las fuentes epigráficas transmiten aspectos no registrados por documentos literarios que amplían la panorámica en torno a la construcción y configuración de la identidad en diversas comunidades y, por tanto, servirá a la compleción de estudios en torno a dichas cuestiones desde un punto de vista histórico.

Acotando su ámbito de aplicación al mundo romano, el siguiente estudio presenta un modelo de análisis supeditado al estudio de la epigrafía y sus interrelaciones con cuestiones relativas a la construcción de la etnicidad y la identidad de grupos sociales a partir de la revisión de los postulados clásicos de este ámbito de conocimiento.

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