Bosco Global ha realizado desde enero a junio de 2020 un análisis de los mensajes en redes sociales y medios de comunicación que promueven la polarización y el odio.
Creemos que es necesario tener una mirada objetiva sobre el seguimiento en las redes sociales y medios de comunicación de la situación de pandemia global de la Covid19. Muchos mensajes, han creado bulos, desinformación y falsedad, … y esto nos preocupa. Si bien los discursos de odio ya existían, la situación vivida en la primera fase de la crisis sanitaria, social y económica han multiplicado su presencia y profundizado en su virulencia.
Desde Bosco Global hemos realizado un análisis de los mensajes en redes sociales y medios de comunicación que promueven la polarización y el odio durante dieciocho semanas.
Con este análisis queremos visibilizar a las víctimas, a los colectivos que sufren la irracionalidad, la falta de respeto y la insensatez. Personas, que una a una merecen dignidad y respeto.
Una sociedad democrática no puede tolerar esta serie de abusos y tenemos que articular espacios de encuentro y de diálogo que nos ayuden a resolver los conflictos. Provocar una cultura de paz y no de odio y polarización interesada, de respeto y no de continua confrontación, de convivencia y no de guetos, de cordialidad, de solidaridad…
El miedo, la desinformación y los prejuicios se han convertido en los ingredientes perfectos para que muchas personas hayan sido objeto de agresiones verbales, agresiones físicas, daños en sus propiedades e incluso la negación de derecho de auxilio, de forma que, por distintas razones han visto vulnerado su derecho a ser protegidas contra cualquier tipo de discriminación.
Desde el principio de la crisis la población de origen asiático ha sido objeto de bulos, agresiones y discriminación, observándose en las cinco primeras semanas de análisis como el único colectivo diana. Desde principios de marzo de 2020 se multiplican el número de hechos discriminatorios por semana y se suman otros colectivos diana como personas ancianas, población gitana, personas con discapacidad, colectivo LGTBI y personas musulmanas.
Mención aparte merecen las personas que se han encargado de nuestros cuidados durante la crisis sanitaria -personas que han trabajado en servicios de emergencia, centros de salud y supermercados-: se convirtieron en objeto de insultos, agresiones físicas y daños en sus propiedades.
Los partidos políticos, de todo color y responsabilidad, también han sido objeto de mentiras y de insultos. Ni siquiera la ciudadanía en general se ha librado de las críticas, falsedades y agresiones: personas que viven en pueblos contra personas que viven en ciudades; personas del interior contra personas de la costa; creyentes de unas religiones contra otras;…
Nada ayuda, para contrarrestar este ambiente, el lenguaje belicista usado por personas con responsabilidades políticas y sanitarias; así como las personificaciones de la COVID19 y la deshumanización de colectivos diana que promueven un ambiente de tensión en el que la única solución es que unos –poderosos- se impongan a otros –débiles-.
Este aire de odio que respiramos no se previene ni se para con mascarillas desechables. Es necesario hacer un serio trabajo de reflexión sobre qué uso hacemos de las redes sociales, en qué medida somos medio de propagación de bulos y falsedades o somos capaces de actuar parando la propagación del “virus del odio”, fomentando un discurso de la cordialidad. Es necesario levantar la mirada y comprender que la resolución pacífica de los conflictos es la única salida honorable para una sociedad que se dice desarrollada.
Palabras clave
Ponencia Online
Documentación de apoyo a la presentación ONLINE de la ponencia
Documento Complementario de Apoyo
Descargar la-pandemia-del-odio.pdf
Eva Picado Valverde
Comentó el 02/06/2021 a las 17:12:40
Enhorabuena por el estudio. Muy interesante. Necesario seguir avanzando
Responder
Joana Topa
Comentó el 24/05/2021 a las 12:05:53
Muitos parabéns pelo trabalho desenvolvido. Em Portugal existiu também um aumento dos discursos de ódio, populistas, xenófobos durante a pandemia. É nosso interesse perceber como esses discursos têm
vindo a contribuir para o reforço da discriminação contra as mulheres, as pessoas LGBTI, racializadas, ciganas, migrantes e refugiadas, particularmente em contexto de pandemia por COVID-19 bem como podemos desconstrui-los. Gostaria de vos perguntar se estão a ser pensadas políticas públicas nesse sentido em Espanha. Obrigada.
Responder
Ricardo Mejía Fernández
Comentó el 20/05/2021 a las 22:32:51
Gracias, Rosa, por tu estupenda ponencia. ¿Crees que podríamos enumerar e identificar con facilidad esos "colectivos diana" que mencionas? ¿En qué nos basaríamos, antropológica y sociológicamente, para agrupar a personas diferentes en dichos colectivos?
Un saludo muy cordial!
Responder
Rosa Mª Macarro Carballar
Comentó el 21/05/2021 a las 08:44:35
Estimado Ricardo
Los colectivos diana se determinaron a partir de que las tipologías de causas que establece el informe anual de delitos de odio del Ministerio del interior. A partir de ellas desde el equipo identificamos colectivos que podían ser objeto de una o varias tipologías de causas.
Por ejemplo, en la causa “ideología” establecimos que las personas o colectivos podrían estar vinculados a la ciudadanía de forma general, a personas que ostentan cargos en gobiernos, en particos de la oposición, en la jefatura del estado, entre otros.
En la causa “racismo/ xenofobia” se consideraron grupos diana como población gitana, población de origen africano, personas de origen asiático y personas de origen americano, entre otras; aunque en los datos observados hubo grupos de población que después fueron descartados por no representar datos mínimamente significativos (p.e. personas de origen americano).
Y la realidad de los datos nos obligó a establecer nuevas categorías, como “emergencias COVID19”, por ser un grupo muy concreto dentro del de “ciudadanía”.
Es por ello que el criterio de creación de las categorías ha estado condicionado por el contexto y por el tipo de repertorios de odio e intolerancia encontrados.
Responder
Norma Silva Sá
Comentó el 20/05/2021 a las 20:02:46
Hola Rosa,
te felicito por el estudio, super interesante y necesario.
Me quedé a reflexionar acerca de caso de mi país, Brasil, en que el discurso del odio llega desde el hombre que ocupa la presidencia. ¿Qué impacto en la población podemos esperar cuando son las "autoridades" que marcan el discurso del odio?
Un abrazo,
Responder
Rosa Mª Macarro Carballar
Comentó el 21/05/2021 a las 07:55:19
Estimada Norma
Cuando las narrativas y los mensajes forman parte del argumento que se da de forma sistemática desde una situación de estatus o poder pueden llegar a tener más calado en algunas personas.
El lingüista Teun van Dijk nos dice al respecto que es necesario tener en cuenta el contexto de las personas que reciben los mensajes. En sus textos argumenta que para que se pueda llegar a la manipulación es necesario que se cumplan algunas condiciones:
• Falta de conocimiento sobre la temática de la que trata el mensaje (de forma que la información recibida no se analiza de forma crítica)
• Normas, valores o ideologías que pueden enganchar parcialmente con los mensajes que se dan
• Emociones personales que conectan con la información recibida
• Tendencia a aceptar los discursos normativos, es decir tomar la ley o la norma como la regla general (en vez de confrontarla con criterios éticos que pueden confrontar con la norma establecida)
Responder
Francisco Javier Rueda Córdoba
Comentó el 20/05/2021 a las 13:16:31
Buenas tardes y muchísimas gracias por la ponencia. Mi pregunta guarda relación con el relato belicista en el que se enmarca la respuesta institucional a la pandemia en un primer momento, y su contrapartida popular en torno a los relatos de los balcones, los aplausos, mensajes del tipo "Esta curva la bajamos entre todas", etc. Querría saber tu opinión sobre las posibles razones por las que discursos de solidaridad colectiva no tienen la misma facilidad de permear en acciones posteriores que los discursos de odio. ¿Crees que es posible articular discursos solidarios y de tolerancia que invaliden o neutralicen los relatos belicistas que surgen de las instituciones? Muchas gracias!
Responder
Rosa Mª Macarro Carballar
Comentó el 20/05/2021 a las 14:31:32
Estimado Francisco Javier
En primer lugar agradecer su interés en nuestro estudio.
En relación a lo que me pregunta debo decirle que tengo una hipótesis basada en una teoría sobre los valores. En base al modelo de valores descrito por B. Hall y B. Tonna (cuyos procedimientos de análisis de valores fueron validados por la Universidad de San Francisco y posteriormente por la APA (USA) y en España por la Universidad de Deusto) los comportamientos están condicionados por interacciones y priorizaciones de valores.
En este sentido, en contextos de miedo o incertidumbre, muchas personas se repliegan a valores vinculados con la Seguridad, la Protección y la Supervivencia.
Cuando esto ocurre otros valores, que tiene más que ver con la Visión y los Principios a los que aspiramos, suelen pasar a un segundo plano. Y dentro de estos valores encontramos algunos, que son responsables de comportamientos prosociales, como Equidad / Derechos, Dignidad humana, importancia de la Diversidad, Interdependencia y Armonía global.
Desde este enfoque es normal explicar el comportamiento de muchas personas que ve coherente aplaudir desde los balcones (donde además se siente parte de un colectivo), pero ve con recelo todo lo que tiene que ver con aquello que se sale de los mensajes normativos.
Para bajar a la calle y salir a ayudar a otras personas, sabiendo que corres riesgo para tí y tu familia, es necesario que los valores vinculados a la seguridad y a la supervivencia tengan un peso relativo bajo y que los valores vinculados a la prosocialidad y el bien común sean fuertes y formen parte de tus convicciones reales.
Para finalizar diré que, como dicen multitud de estudios, las personas estamos condicionadas no solo por el contexto general, sino por las palabras y las narrativas sociales. En este sentido lo que está en nuestra mano es trabajar para que se afine con el uso de las palabras y que los mensajes que se lancen a la ciudadanía abunden en la colaboración, el bien común, el valor de la diversidad y la resolución pacífica de los conflictos, como la única vía para salir de la crisis.
Responder
Tirso Javier Hernández Gracia
Comentó el 19/05/2021 a las 14:51:58
Hola Rosa Mª Macarro
Excelente tema el que desarrollas. Estoy de acuerdo contigo, el miedo es uno de los principales causantes de la propagación de “discursos peligrosos” durante crisis como la de la pandemia de COVID-19. Quizás la educación sea una alternativa que permita contrarrestar este fenómeno. qué piensas al respecto? si fueras la máxima autoridad en una Universidad, qué estrategias podrías proponer para intentar poco a poco evitar en lo posible este tipo de efectos?
Responder
Rosa Mª Macarro Carballar
Comentó el 20/05/2021 a las 08:03:21
Estimado Tirso, justo ese es el tema de mi tesis doctoral. Estoy estoy realizando un estudio de las estrategias educativas que se han desarrollado en España para la prevención de los discursos de odio e intolerancia, con el objeto de establecer parámetros de calidad. Desde mi entidad llevamos varios años desarrollando intervenciones de este tipo con universidades y con centros escolares. si quiere tener más información sobre estas intervenciones puede escribirme a mi correo rosa.macarro@boscoglobal.org. Gracias por su interés
Responder
Rosa Mª Macarro Carballar
Comentó el 19/05/2021 a las 07:56:52
Estimado Albert
en primer lugar agradecer tu interés por el informe.
En relación a la selección de las noticias y repertorios de odio he de decir que hemos intentado (y creemos conseguido) identificar la práctica totalidad de eventos que se han producido en España en el período de tiempo analizado. Para ello semanalmente se hacía una búsqueda por, al menos dos evacuadoras, en Internet y en redes sociales de todos los hechos que pudieran ser calificados como mensajes de odio e intolerancia. En esta búsqueda se utilizaban palabras clave y posteriormente se realizaba una comparación entre los hechos encontrados entre las evaluadoras y los que se habían localizado en páginas de verificación y desmentidos.
En relación al incremento, según los datos de los que contamos, en una semana habitualmente suelen conocerse entre 1 y 3 hechos. Sin embargo en las primeras seis semanas del estudio encontramos hasta 7 hechos semanales (con una media de 3,66), que ya nos mostraba un pequeño incremento. La semana 7 se produjeron 10 (marcando una nueva tendencia de aumento) y las 7 semanas posteriores la media semanal de hechos analizados llegó a 27,42 hechos analizados. Las últimas cuatro semanas del estudio encontramos una media de 12 hechos semanales.
No obstante, si necesita algún otro dato puedo proporcionárselo.
Saludos
Responder
Albert Mora Castro
Comentó el 18/05/2021 a las 14:48:05
Buenas, Rosa Mª.
Quisiera preguntarte por el proceso de selección de la muestra de noticias que habéis utilizado pues no me queda claro cómo se han seleccionado esas noticias, de qué medios, en base a qué criterio, cómo se discriminó lo que se consideraba discurso de odio y lo que no...
Por otra parte, afirmas que los mensajes de odio "han crecido exponencialmente" pero, ¿realmente habéis conseguido demostrar ese crecimiento con respecto a etapas anteriores? Porque una cosa es constatar la existencia esos discursos y otra, mucho más complicada, es llegar a la conclusión empírica de que la pandemia los ha incrementado.
Muchas gracias por tu atención,
Albert.
Responder