El Estado presupone y remite a las fronteras que, como líneas divisorias, simbolizan y contextualizan el paso hacia un terreno habitado por un grupo de ciudadanos sujetos a un Estado de Derecho de obligado cumplimiento. Estos límites físicos facilitan la ejemplificación que atribuye y configura a los Estados Nación como entes que son enunciados y expuestos de manera oblicua, es decir, planteándose como necesaria la adscripción a una plataforma la cual designa su carácter distintivo y, a su vez, la propia diferencia con respecto al sujeto. Esta consideración que parte de un ego, no puede atribuirse como un simple señalamiento subjetual, a saber, el “allí” se presenta como una consideración que, implícitamente, sitúa, refractariamente, un lugar en el cual no está el sujeto ni la plataforma de referencia en la cual se sitúa; así, a medida que se pasan los controles y protocolos propios de dichas zonas de paso, el “forastero” se acerca al Estado Nación como terminus ad quem y al alejarse se presenta como terminus a quo (de igual manera que los habitantes de Santiago de Compostela no son peregrinos y sólo lo pueden ser a través del camino que estará formalizado de manera oblicua teniendo en cuenta la referencia o punto final, esto es, la propia Ciudad del Apóstol).
Del mismo modo, las líneas fronterizas se expanden dentro e internamente en el propio Estado facilitando la comprensión de ciertas características históricas, legislativas y culturales que varían entre los sujetos nacionales de un mismo Estado. Estas diferencias internas que quedan subsumidas en identidades colectivas que sólo se producen al ser miembro de una clase o conjunto. Las identidades tienen, como analogía, la forma de un árbol predicamental (como el porfiriano) donde, a medida que se desciende por las raíces, aparecen características agregadas a los individuos en su condición, no obstante, de ciudadanos.
En estas breves líneas proemiales, se observan características que dan a pie a la explicación de ciertos fenómenos y particularidades que definen y constituyen a cada uno de los Estados. Es por ello que el análisis versa sobre dos teorizaciones o filosofías políticas que vienen a evaluar los conflictos geopolíticos y las tensiones que se originan bajo un binomio, que sin ser muy certero al menos se presenta como operativo a un nivel discursivo, que tiene como principal referente a las fronteras (sea para afirmarlas sea para negarlas) como el de Nacionalistas-Globalistas o, en los términos de Nussbaum, Patriotismo y Cosmopolitismo. Las tesis liberales de Will Kymlicka junto con los profusos análisis, vertebrados o estructurados a partir de Foucault, de la doctora Wendy Brown, centran los debates en cuestiones que van desde lo ético (la preocupación de Brown por la idea, tan manida, de tolerancia o el tratamiento que hace Kymlicka de los valores liberales igualitaristas), la definición de las democracias en torno a dos cuestiones principales: la soberanía y la movilidad o bien, en el terreno ideológico, en lo referido a las prácticas neoliberales y las paradojas en las que van configurando. Las vallas o los muros serán presentados como manifestaciones de Estados con una soberanía empobrecida: como elementos deshumanizadores.
En definitiva, el objetivo será señalar las líneas que definen ambos pensamientos para ver los elementos de cohesión entre ambas perspectivas y las diferencias programáticas en lo que refiere al elemento central o esencial del Estado-Nación.
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Javier Moscoso Cala
Comentó el 22/05/2021 a las 12:45:32
Buenas, Alejandro:
Saludo recibido. Tremendo tema e intervención. ¿Qué lugar piensas que puede tener las aportaciones de Foucault en torno a la gubernamentabilidad y la soberanía en la obra de Wendy Brown? ¿Es la reaparición de los muros una nueva configuración entre gubernamentalidad y soberanía o la prueba de que el poder estatal requiere de la soberanía para legitimarse y revitalizarse?
Saludos.
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Alejandro Ladrero Benito
Comentó el 23/05/2021 a las 11:37:10
Buenas Javier, en la obra comentada de Brown no hay muchas referencias a Foucault más allá de alguna nota sobre sus análisis sobre la racionalidad liberal. Sobre la cuestión de la soberanía, el análisis se centra en criticar la perspectiva anti-liberal (como la de Carl Schmitt) y en un repaso histórico-doxográfico que va desde Bodino.
La tesis de Brown sobre los muros viene a exponer la paradoja siguiente: a una mayor desnacionalización del espacio económico, que produce una serie de problemas y demandas ciudadanas que superan al Estado Nación, se está produciendo una renacionalización del discurso político (una vuelta a la trinchera misma de la nación).
Los muros serían un elemento performativo de una acción del ejecutivo que, tras esa teatralización, esconde la propia pérdida del "mando" político: el muro es el ejemplo, justamente, de la pérdida de soberanía de los Estados Nación. Los muros, además, generan una serie de efectos colaterales que, justamente, exponen la pérdida de, incluso, el monopolio legítimo del uso de la fuerza (patrullas ciudadanas que vigilan los alrededores).
La propia Brown termina su obra con un análisis psicoanalíticos sobre los muros como mecanismos de defensa.
Por ahí irían los tiros. Echaré un ojo a la cuestión sobre la soberanía en Foucault .
Gracias y un saludo.
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Alejandro Ladrero Benito
Comentó el 21/05/2021 a las 18:51:44
Buenas David, la noción de nación étnica en Bueno se podría poner en sintonía, aunque de forma crítica, con lo expuesto por Kymlicka al definir a los estados multinacionales; donde nación es un sinónimo cultura (desde una perspectiva que, como sabemos, viene o está dada por la influencia de la filosofía germana). Junto con la obra que comentas y el Mito de la Cultura se pueden realizar algunas crítica a su noción de estados multinacionales. Por otra parte, la concepción imperial (y todo lo relacionado también con el ego trascendental o las organizaciones totalizadoras) expone la posibilidad (posibilidad que dejó abierta el propio Bueno en el primer ensayo de la categorías políticas) del accionar político que estipule la superación del Estado Nación según organizaciones transestatales, es decir, plataformas continentales en situación de coodeterminación total. Aquí aparecen dos opciones: a) En este contexto hipotético supraestatal, una alternativa transestatal aplicada a la Hispanidad podría suponer, de hecho, un súper-Estado hispano. b)tampoco se excluye la posibilidad de que los distintos «fragmentos» del mundo hispánico acabasen integrados, como partes menores, en otras unidades mayores culturalmente diferentes, lo que, a la postre, podría conducir a la desaparición de la Hispanidad.
Con respecto a Foucault, debería repasar su obra, pero en lo relativo a su noción de poder y del microfísica del mismo como sus tesis sobre los sistemas de dominación y de producción de racionalidad, creo que, en consonancia o ligándolo con el MF, la noción de poder etológico y de prolepsis que expone Bueno en el Primer Ensayo de las categorias de las CCPP podría relacionarse, en un modo crítico, con las nociones sobre el poder de Foucault teniendo también como referencia las nociones de autonomía vs heteronomía y las cuestiones relativas a ciertos holismos en diferentes ámbitos: a) Con respecto a la propia estructura social: Bien sean descendentes solo hay individuos y no sociedad o sean ascendentes no existe el hombre sino la sociedad. y b) Con respecto a la propia definición esencial de lo que es la política: Y la reducción descendente de está última categorías psicológicas tales como: el goce, la libido, mecanismos de dominación, voluntad de poder, etc.
Gracias y espero haber al menos situado las cuestiones que, por otra parte, son de gran interés y amplitud.
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Daniel David Martínez Romera
Comentó el 21/05/2021 a las 18:18:20
Enhorabuena por la presentación. Atendiendo al tratamiento de la dicotomía planteada, quería consultarle su opinión sobre la posición de Gustavo Bueno respecto a la visión del concepto de nación y la explicación geopolítica que realiza a partir del concepto de imperio, en textos como España frente a Europa. ¿Considera compatible este planteamiento con la visión del poder que introduce Foucault?
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