Los movimientos feministas en Corea, al igual que en el resto de países asiáticos, comienzan como resultado de la interacción con occidente y, principalmente, con las organizaciones políticas y religiosas que se ocupaban de los problemas de las mujeres surgidos a finales de 1800. Esto propició una gran diversidad de grupos, categorías, símbolos y valores. En otras palabras, la arena en la que se desarrollaron dichos movimientos feministas estaba compuesta por personas de diferentes contextos que lucharon por los derechos de las mujeres según interpretaciones muy variadas. Por ello, estas primeras corrientes feministas se han caracterizado por la tensión, el antagonismo, la competición y la cooperación entre los diferentes grupos. En él encontramos desde universitarias anti-colonialistas, formaciones cristianas, estudiantes educadas en ideas socialistas en Japón, etc.
No obstante, pese a la diversidad desde la que trataba los temas sociales e interpretaban los intereses de la mujer, todos estos grupos y organizaciones surgen a partir del movimiento Nueva Mujer (Sin Yŏsŏng, 신여셩) que se desarrolla en los años veinte en Corea. Éste tenía sus raíces en el ideal feminista New Woman, que surgió a fines del siglo XIX, el cual evidenciaba cómo los hombres habían empujado a las mujeres hacia los roles de género tradicionales, volviéndolas seres sumisas. Este enfoque caló profundamente en las mujeres coreanas, las cuales se habían visto recluidas en las habitaciones de sus casas tras la instauración del neoconfucianismo y el sistema de descendencia patrilineal durante la dinastía Joseon (1392-1920). En este largo periodo de la historia coreana, el estatus de la mujer, que se casa y entra a formar parte de la familia del hombre, y el de la hija, que no contribuye ni continúa la línea de descendencia paterna, fue bajo en contraposición al patriarca de la familia que ostentaba una posición de poder y autoridad absoluta. Las mujeres coreanas reaccionaron frente a este sistema que promovía la visión de una mujer virtuosa, moderada, casta y retraída, urgiendo la necesidad de reflexión crítica y cambio del mismo. Un ejemplo de ello es el artículo de Kim Hwallan “Urging men to critically reflect on themselves” (1920).
Ahora bien, cabría preguntarse ¿realmente la tradición confuciana es sexista? Sin negar las prácticas discriminatorias sufridas por las mujeres y justificadas por el discurso confuciano esta presentación reivindica que la filosofía confuciana no conlleva un discurso sexista y para ello analizará el pensamiento de la pensadora Im Yunjidang (任允摯堂, 1721-1793). Considerada como la primera filosofa confuciana coreana, la autora defendió que los hombres y mujeres eran iguales por naturaleza y que la mujer también podía convertirse en una sabia confuciana (君子).
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Jorge León Casero
Comentó el 20/05/2021 a las 10:59:08
Buenos días Gloria,
muchas gracias por tu ponencia. No conocía la obra de Im Yunjidang (no he podido introducirme aún en el pensamiento koreano) y me ha resultado de gran interés para poder complementar algunas de las clases de Filosofía comparada que imparto sobre el pensamiento sínico y japonés.
Quería preguntarte si existe y/o conoces alguna obra del confucianismo koreano previa a la de Im Yunjidang relativa a la educación de las mujeres. Estoy pensando en algo parecido a la obra Onna-daigaku del confucianista japonés Ekiken Kaibara (1630-1734), que en este caso sí que era completamente sexista (defendía la sumisión y obediencia de la mujer a los padres y esposos), y que estuvo vigente en Japón hasta la Era Meiji. ¿Existen obras confucianistas koreanas de este tipo que pueda consultar? Lo digo porque de existir, me interesaría ver cuáles son los principales puntos de ruptura que introduce Im Yunjidang respecto a las mismas.
Un saludo y muchas gracias otra vez!
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Gloria Luque Moya
Comentó el 20/05/2021 a las 11:59:43
Buenos días,
muchas gracias por su comentario e interés.
Los neoconfucianos de Joseon, siguieron esta sumisión y obediencia y las obras clásicas de referencia fueron los Cuatro libros para la mujer (女四書) chinos: Mandatos para la mujer (Nǚjiè, 女誡) de Ban Zhao; Las analectas de las mujeres (Nǚ lúnyǔ, 女論語) de Song Ruoxin y Song Ruozhou; Lecciones domésticas (Nèixùn, 内训) de la emperadora Xu y Esbozo de un modelo de mujer (女范捷录) de la señora Liu.
Sin embargo, hay textos breves que tienen mucho jugo traducidos del coreano al inglés: por ejemplo "Instructions for the Inner Quarters" de la reina Sohye y "Instructions to my daughter" del confuciano Son Siyeol. Ambos en la obra Sources of Korean Tradition, volume 2, New York: Columbia University Press.
Por favor no dude en escribirme (glorialm@uma.es) si quiere más bibliografía sobre el tema.
Gloria
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Jorge León Casero
Comentó el 20/05/2021 a las 12:08:42
Muchas gracias por las referencias!! Voy a empezar con estas recomendaciones y si me surgen dudas no dudaré en escribirte!
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Gloria Luque Moya
Comentó el 20/05/2021 a las 08:44:55
Buenos días,
muchas gracias por su comentario e interés en la comunicación.
Estoy totalmente de acuerdo con la observación, aunque la autora continúa con sus obligaciones confucianas, con toda seguridad fueron esas circunstancias las que le permitieron dedicarse al estudio y autocultivo.
En relación a la bibliografía sobre la Nueva Mujer, hay un libro fantástico dedicado al tema con textos de autoras de la época: Choi, Hyaeweol (ed.) (2013), New Women in Colonial Korea, New York, London: Routledge.
Gloria
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María Tocino Rivas
Comentó el 20/05/2021 a las 13:03:05
Muchas gracias por su comentario y por la referencia, Gloria. Y, de nuevo, gracias por la presentación tan clara.
Un saludo,
María
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María Tocino Rivas
Comentó el 19/05/2021 a las 17:25:25
Buenas tardes, Gloria. Muchas gracias por su comunicación, que me ha permitido conocer a esta filósofa coreana tan interesante. Primero, solo quería hacerle una observación: seguramente, las circunstancias vitales de Im Yunjidang (es decir, la ausencia de figuras masculinas en su familia) no expliquen necesariamente su feminismo, pero sí que ella pudiese "autocultivarse", como dice en la presentación, dedicándose al estudio de los clásicos confucianos, a diferencia de la mayoría de mujeres de la época. Y, en segundo lugar, quería preguntarle por el movimiento Nueva Mujer de comienzos del siglo XX y por su relación con algunas posibles ideas feministas provenientes de Occidente. ¿Podría aclararme algo al respecto o recomendarme alguna obra que analizase este momento histórico?
De nuevo, muchas gracias por su clara presentación y un saludo cordial,
María
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