Reflexiones en la frontera: Análisis crítico del proceso identitario en mujeres extra-comunitarias en materia de desigualdades socioculturales y de género

El pensamiento fronterizo que caracteriza el mundo occidental dignifica el desarrollo de procesos identitarios propios y rechaza los que considera ajenos, poniendo en cuestión en estos casos las expresiones de la diversidad humana.  En la tabla de medir occidental no parece haber lugar para proyectos decoloniales ni depatriarcales, aunque la aspiración de una educación liberadora sea cada día más fuerte, así como más frecuentes los procesos de enseñanza-aprendizaje que encuentran su sentido educativo, precisamente, en la problematización de los discursos y prácticas tradicionales.

Aunque la frontera en sí no determina la activación de procesos de exclusión como tal, sí genera un espacio estructurado de diferenciación y distinción; no sólo de territorios, sino también de personas, identidades y culturas. Dibuja una línea divisoria en la sociedad, distinguiendo entre ciudadanía propia y extranjera o extraña, legal e ilegal, que suele desembocar en una expresión diferencial de identidades subalternas susceptibles de ser excluidas.

El sistema de dominación patriarcal se refuerza en los procesos migratorios, haciendo más profundas las desigualdades de género. ¿Cómo siente una mujer no occidental la presión y las consecuencias del pensamiento fronterizo en sus modos de ser, saber y poder? Para responder a esta cuestión nos propusimos el análisis crítico de la construcción de identidad en relación con el proceso migratorio desde la perspectiva de género y la cultural. El texto describe las asunciones identitarias en mujeres extracomunitarias durante el proceso migratorio en torno a esos tres ejes analíticos del ser (identidad), el saber (educación) y el poder (relaciones de poder/autoridad). Desde estas perspectivas paradigmáticas y entendimientos, el análisis fronterizo feminista incluye planteamientos interculturales que nos ayudan a comprender mejor otras realidades diversas en los contextos educativos.

Para responder a estas cuestiones seguiremos una metodología de Teoría Fundamentada (TF). Con orientación inductiva y enraizada en la perspectiva interpretativa de la investigación social,  se propone analizar y comprender la complejidad del fenómeno estudiado atendiendo a los significados emergentes de los datos, agrupados en categorías conceptuales mediante el contraste o comparación de la información aportada por las participantes en documentos y entrevistas; dando lugar a una reconceptualización o actualización de la perspectiva teórica que las sustenta.

Entre las conclusiones cabe destacar la necesidad de un nuevo entendimiento y reconceptualización de los procesos migratorios que nos ayuden a remover las bases conceptuales socialmente establecidas; tener como meta la búsqueda de comprensión de otras miradas y experiencias, que han sido silenciadas o subordinadas durante el mismo; abriendo paso a nuevos paradigmas que sean capaces de incluir las propias desigualdades socioculturales y de género que se activan o producen en los procesos migratorios. Para terminar, destacamos la importancia del papel de la educación en la construcción de las identidades y, en este sentido, el valor de posibles alternativas educativas  transformadoras con planteamientos inclusivos que aborden, problematicen y contribuyan a superar los conflictos de la diversidad; desde la comprensión y reconocimiento de las diferencias identitarias y la igualdad de derechos que a todos/as deberían asistirnos en el contexto de sociedades plurales, abiertas, democráticas y cosmopolitas.

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