Relaciones de desigualdad en un conflicto socio-ecológico: el caso de la Sierra Minera de Cartagena-La Unión

Una cuestión que despierta gran interés en las sociedades actuales es la de conseguir unos estándares marcados a la idea de calidad de vida y bienestar social. Esta idea de calidad de vida se asocia cada vez más a poder vivir en zonas con un alto valor ecológico y una variedad de recursos ecosistémicos proporcionados por ese entorno, dando así un valor añadido a la experiencia y visión de unas condiciones de vida favorables.

Los conflictos socio-ecológicos no siempre son percibidos por la comunidad que vive en el territorio de influencia del conflicto. Debido a diferentes procesos de construcción social y cultural basados en una asimilación particular de los riesgos ambientales, se generan distintos procesos o estructuras sociales de vulnerabilidad o exclusión desde un amplio abanico de dimensiones: social, económica, sanitaria, ambiental y territorial.

El desarrollo comunitario en un conflicto socio-ecológico por contaminación local, en el caso que nos ocupa originado por las actividades minero-metalúrgicas abandonadas, puede hacer que los procesos de vulnerabilidad se amplifiquen -o disminuyan- bajo un enfoque sistémico particular de las comunidades expuestas a dicha contaminación, sesgado por el recorrido histórico y culturalmente definido como lo que “es aceptable” o “lo que se está dispuesto a tolerar”, bajo unas condiciones de desigualdad no elegidas, transmitidas entre generaciones y normalizadas por los residentes.

El estudio de la contaminación ambiental en el caso de la Sierra Minera de Cartagena-La Unión, en el sureste de la Península Ibérica, producida por actividades minero-metalúrgicas ofrece una experiencia multidimensional; por una parte y, objeto principal de esta comunicación, unas características muy singulares de precariedad desde el punto de vista socio-económico, y además, estas comunidades no solamente son vulnerables por su situación en términos socio-económicos, sino que la exposición a elementos potencialmente tóxicos, dentro de este contexto de vulnerabilidad hace más difícil la capacidad de reacción comunitaria para la mitigación y/o protección, dando lugar a la aparición de situaciones de estrés, incertidumbre y sufrimiento ante una situación de crisis ambiental y de salud.

Se produce así la evolución de lo que es percibido por las comunidades como un contexto de alto valor ecológico a un entorno amenazante, por los posibles efectos de la contaminación, de la que existe una alta desinformación en la población, aumentando su vulnerabilidad y generando como respuesta social la aparición de peculiares formas de vida y delicados sistemas sociales para la supervivencia de alguna de estas comunidades inmersas en el conflicto socio-ecológico.

Esta comunicación pretende explicar desde una perspectiva multidimensional en cuanto a su posición social, privación material, posibilidades de desarrollo y acceso a recursos, cuáles son las relaciones de desigualdad socio-ecológicas que repercuten en las condiciones de vida de una de las comunidades expuesta a la contaminación por metales pesados y diferentes compuestos físico-químicos de su transformación.