La escuela infantil y primaria de Lobur, St Irine, en la que se desarrolla este programa, se encuentra en la misión de Lobur en Turkana (Kenia). La misión pertenece a la Comunidad Misionera de San Pablo Apóstol (MCSPA). Esta comunidad se estableció en el territorio en los años 80 y desde entonces ha centrado su actividad en las necesidades básicas de la población.
La misión de Lobur se encuentra al norte de Turkana, en el llamado Triángulo Ilemi – un territorio en conflicto entre las fronteras de Kenia, Etiopía y Sudan del Sur – con una población de alrededor de 40,000 habitantes, donde llueve dos veces al año. Los años de verdadera sequía, hacen que se acentúen los conflictos entre las diferentes comunidades vecinas (robo de ganado, bandidaje, asesinatos), por puntos de agua y pastizales, ya que los más alejados hacen que tengan que recorrer largas distancias. Estamos hablando de una población mayoritariamente pastoralista en una zona remota y marginada con falta de servicios sociales y de infraestructuras (escuelas, hospitales, carreteras) y la mala política comunitaria es prueba de ello.
A lo largo de los años la misión ha ido creciendo hasta llegar a unas 300 personas, entre trabajadores y familias de los alrededores, que se han ido asentando cerca de la misama buscando refugio seguro y poder disfrutar de los servicios de primera necesidad, como recursos hídricos, programa de salud, y el proyecto de agricultura. Entonces se comenzó un enfoque centrado en la educación de los más pequeños, para ofrecer un desarrollo integral a las nuevas generaciones, ante un mundo inmerso en la globalización, que les permita tener opciones ante el futuro. Hablamos de niños que sus familias aun viven en chozas, sin agua y sin luz pero que tienen acceso a nuevas tecnologías como Smart phones, que representan una ventana abierta al mundo.
El objetivo de este programa es llegar a producir un cambio en una cultura que vive en una continua violencia estructural por sus condiciones de vida extremas. Queremos propiciar el fomento de la paz en las futuras generaciones, a través de valores, actitudes, y comportamientos. Trabajamos las emociones para ayudar a los niños a tener más habilidades sociales y aprender a vivir y convivir de forma pacífica. Queremos formar a los profesores en la mediación para fomentar soluciones creativas y pacíficas a los conflictos; con esto conseguiremos que a parte de los aprendizajes académicos también reciban aprendizajes vitales que traerá una mejora de la convivencia. Para que esto funcione tenemos que tener la colaboración de las familias y del resto del entorno con lo que esto requiere trabajar especialmente con las madres y padres. Es un gran reto, pero también llevamos mucho ganado y podemos hacer grandes avances en la convivencia de esta sociedad.
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Silvia Vaca Gallegos
Comentó el 23/07/2021 a las 03:28:06
Estimada Maque el trabajo me ha gustado mucho y considero un gran ejemplo para Ecuador donde tenemos pueblos con culturas diversas y en extrema pobreza. ¿ Cómo trabajar en las habilidades socio emocionales de los más pequeños en concordancia con las creencias y estilos de los padres propios de la misma cultura?. Gracias
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Marta Talavera Ortega
Comentó el 23/07/2021 a las 09:42:31
Estimada Silvia, las habilidades socioemocionales, desde luego se deben acoplar a las creencias y estilos de sus padres, pero tambien han de procurar su crecimiento personal e individual, contextualizado, pero adaptado tambien a la personalidad de cada niño/a
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Inmaculada Ruiz
Comentó el 21/05/2021 a las 09:44:41
Hola Maque, me gustaría darle mi más sincera enhorabuena por este gran trabajo. Estoy de acuerdo con el compañero cuando confirma que ese cuidado de los niños desde pequeños es muy importante porque se adquieren valores desde la infancia, sin embargo, el tiempo que dedican a este cuidado lo están restando a aspectos que también deben desarrollar en esta etapa.
Me ha gustado mucho si trabajo.
Saludos,
Inma
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Marta Talavera Ortega
Comentó el 23/07/2021 a las 09:45:25
Efectivamente, en estos ambientes, compaginar formacion con otras tareas es importante, pero se debe conseguir que la educacion sea una de las actividades prioritarias para las edades mas tempranas. Eso es clave de exito en estos programas.
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Flavio Muñoz Troncoso
Comentó el 21/05/2021 a las 08:44:17
Estimada Maque,
Felicitaciones por la valiosa labor que realizas y por esta hermosa ponencia.
En el resumen refieres trabajar las emociones para propiciar habilidades sociales. ¿De qué forma se materializa la educación socioemocional entregada a los niños?
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Maque Falgás Marín
Comentó el 21/05/2021 a las 09:15:32
Hola Flavio, gracias por tu comentario. Turkana y los turkana viven en una cultura nómada y tradicional, que por las condiciones de vida viven en una violencia constante a todos los niveles. El trabajar con la emociones y con un ambiente amigable les habré a un mundo de cariño, amor, ... que les hace abre a un mundo nuevo de relaciones. Por supuesto, tienen que lidiar con lo que ya hay, pero la única manera de empezar un cambio es desde edades tan tempranas. Muchas gracias.
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Maque Falgás Marín
Comentó el 21/05/2021 a las 09:24:50
En Turkana, los niños reciben mucho cariño en los primeros años, hasta que nace el siguiente hermano/a. Entonces, la madre "coloca" al mayor en una segunda posición y este con 5-6 años incluso pasa a cuidar del otro. Se vuelven puros supervivientes. Para algunos aspectos está muy bien porque los hace más independientes y resilientes, pero por supuesto hay una serie de carencias i mportantes que a la larga aparecen.
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